miércoles

El Reflejo


El Reflejo
Uno, dos, tres....trece, catorce...
escalones...
Sus pies quedan inmóviles ante la puerta, cientos de años sin rozar ese pomo. Aun no sabe por que razón ese día, al ir a visitar a sus padres ha sentido esa necesidad de subir al viejo altillo.
Posa su mano en el pomo, las bisagras resbalan suavemente al entornar la puerta. La luz entra por los pequeños ventanales dejando ver la gran estancia, su mirada abarca lentamente detalle a detalle la posición de los objetos , almacenados durante años por la familia y ante su sorpresa todo parece igual...
Nada ha cambiado...Camina lentamente, sus pasos por instinto se dirigen al ala izquierda. El gran baúl del fondo, ante el que se arrodilla, lo acaricia cerrando los ojos.
La voz llega suave y dulce.


-Te estaba esperando
-Lo sé, -contesta ella en un susurro-.
-Te fuiste sin decirme nada.
-Lo siento, no fue mí intención.
-Siempre mantuve la esperanza de que volverías.
Ella mantiene la vista ante el baúl, lo abre y sin girar la cara le dice a la voz:
-Aun sigue aquí mi oso de peluche...y el tira-chinas.. ¿te acuerdas?.
-Si, disfrutamos mucho, fue una infancia muy feliz.
-Mira!... Mis notas del colegio...bueno, mejor no mirarlas... - sonríe.
Durante unos minutos el silencio se adueña del tiempo.
-La vida no es tan fácil como una espera..
-Sé por que has vuelto, durante años te llame pero tú nunca volviste a mí, esperé pacientemente por que creía en ti y sabía que volverías... - Le dice la voz.
Ella gira su cara levemente, el gran espejo se alza majestuoso tan brillante como lo recordaba. Dentro del espejo, la niña de doce años sentada en un muro, le sonríe moviendo sus pequeños pies en el aire.
Ella arrodillada le devuelve la sonrisa y en ese momento…
Se refleja en su mirada.....
Este relato pertenece a mi colección de Relatos de Madrugada.
El proyecto de este libro, es combinar relatos con imagenes mias y artistas invitados.
Fotografía Lui B.Copyright. Luisa Balada.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Precioso capitulo de una infancia, yo como mucha gente se ve reflejado en este " Reflejo", particularmente a mi me gusta volver muy a menudo a mi pasado y comparar el futuro, es precioso Luisa te felicito

Juan

Raúl dijo...

El volver a la infancia, siempre conlleva un tanto de expiación de culpas; de desandar el camino para ver dónde, en qué cruce, nos equivocamos al girar.
Precioso texto y, también, preciosa la fotografía, Luisa.

Jose Ruiz Quesada dijo...

Bello canto a la inocencia perdida y al recuerdo de la infancia, el baúl y el espejo siempre nos traerá recuerdos de nuestra niñez, aquellos de nuestra pura inocencia que no alcanzábamos a comprender, enhorabuena amiga por este sincero pensamiento...,
Un canto a nuestros recuerdos.
Con mi afecto sincero te mando un abrazo y un beso, tu amigo José.

josé javier dijo...

Magnífico trocito, Luisa, de tus recuerdos de infancia.
Me ha gustado saber que es parte de un proyecto de libro. Te animo a completarlo. Precisamente puedes ver en mi blog que acabo de hacer lo mismo, publicar una recopilacion de mis post seguidos de vuestros comentarios.
Un abrazo desde sevilla. J.J.

Luisa Balada dijo...

Muchas gracias a todos¡¡

ferran dijo...

me ha gustado. bonito.